sábado, 7 de junio de 2008

El PCE-Salamanca apoya la propuesta de Iguales y otros colectivos LGTB de la Comunidad para considerar el 28-J Día Institucional del Orgullo LGTB

El Partido Comunista de Salamanca muestra su apoyo inequívoco a la propuesta de las asociaciones LGTB de Castilla y León de declarar el 28 de junio como el día del orgullo LGTB. El Partido Comunista de España (PCE) fue el primer partido con representación parlamentaria en defender los derechos del colectivo LGTB, lo que ya hizo patente de modo oficial en 1979, cuando el resto de partidos políticos con representación parlamentaria se oponían a dicho reconocimiento de derechos.

Igualmente, militantes del PCE y otras organizaciones comunistas y de izquierda revolucionaria defendieron los derechos LGTB en los años 80 y 90 en Salamanca a través de diversos colectivos que con el tiempo acabaron constituyendo la actual FELGTB.

Sin más, reproducimos el comunicado del movimiento LGTB en Castilla y León.

EL PCE APOYA LA PROPUESTA DE DECLARACIÓN INSTITUCIONAL DEL 28 DE JUNIO COMO DÍA DEL ORGULLO LGTB



Sin más, mostramos la propuesta de los colectivlos LGTB castellanoleoneses, la cual apoyamos sin dudar:


PROPUESTA DE DECLARACIÓN INSTITUCIONAL 28 DE JUNIO: DÍA DEL ORGULLO LGTB

La realidad social de Castilla y León fuerza todos los años a miles de personas, en especial a jóvenes lesbianas, gays, transexuales y bisexuales a emigrar a ciudades como Madrid o Barcelona en busca de la libertad que no encuentran en nuestra Comunidad.

Por ello, es importante que se eduque a las y los menores en el respeto a la diversidad afectivo sexual. En este sentido, Educación para la ciudadanía puede ser un buen instrumento para acabar con todas estas fobias y, mas allá, las instituciones autonómicas deben fomentar una completa educación afectivo sexual y de identidad de género, con particular atención a la diversidad, en todos y cada uno de los colegios, escuelas e institutos de Castilla y León.

No podemos seguir permitiendo el aumento de la violencia, las agresiones físicas y psicológicas que han marcado de por vida a quienes las han sufrido. Las instituciones autonómicas deben trabajar en la elaboración de normas que protejan a lesbianas, gays, transexuales y bisexuales. Igualmente, no olvidemos nunca que en muchos países del mundo siguen existiendo la cárcel y la muerte para lesbianas, gays, transexuales y bisexuales.

El sistema sanitario de Castilla y León debe garantizar la salud integral de las mujeres lesbianas mediante la revisión de los protocolos de ginecología, el libre acceso a una información veraz que recoja sus necesidades y problemas específicos, con profesionales sanitarios correctamente formados y respetuosos con su orientación sexual e identidad de género. Asimismo, el sistema sanitario de Castilla y León debe hacer frente al tratamiento integral para las personas transexuales, incluidas las cirugías de reasignación de sexo.

Las instituciones autonómicas deben abordar las infecciones de transmisión sexual, y especialmente la pandemia del SIDA, como un asunto de capital importancia en Castilla y León. Es necesario generalizar el acceso a métodos barrera para mujeres, así como la creación de campañas de prevención de las infecciones de transmisión sexual específicamente dirigidas a las mujeres bisexuales y lesbianas, las grandes olvidadas del sistema sanitario de nuestra Comunidad.

Las autoridades de Castilla y León deben fomentar la aceptación, de una manera libre de prejuicios, de todas las familias, incluidas las compuestas por dos papas o dos mamas, en vez de hacerlas invisibles en los medios de comunicación, en los planes de igualdad, en los libros y programas escolares.

Así pues, las instituciones autonómicas hacemos un llamamiento a la sociedad de Castilla y León para garantizar, entre todos, el respeto a las personas lesbianas, gays, transexuales y bisexuales y a su pleno derecho a vivir en igualdad real y libertad en esta nuestra Comunidad.


1 comentario:

Anónimo dijo...

Aún queda mucho por hacer. Estamos empezando a salir a la luz pública, ahora hay que acustumbrar a la sociedad de que somos ciudadanos y ciudadanas de plenos derechos.