lunes, 19 de abril de 2010

Un millar de salmantinos apoyan la campaña del PCE "Pídele cuentas al Rey"


Mas de un millar de salmantinos, en concreto 1.089, han apoyado con su firma la campaña que, durante las últimas semanas, ha venido desarrollando el Partido Comunista de España en el conjunto del Estado.

En Salamanca, la organización provincial del Partido Comunista en colaboración con la Juventud Comunista, instaló en diversos puntos de la ciudad ocho mesas de información y recogidas de firmas entre el 11 y el día 17 de abril, hasta las que se acercaron muchos salmantinos para recibir información sobre el contenido de la campaña y para aportar su firma.


De las mesas instaladas, las que recibieron mayor numero de apoyos, fueron las colocadas en el Campus Unamuno de la Universidad de Salamanca, hasta las que se acercaron unos cuatrocientos universitarios para estampar su firma, lo cual confirma la tendencia de que jóvenes son el sector de la población mas crítico con la institución monárquica y entre los que el sentimiento republicano es mayor.

Las firmas recogidas en Salamanca, junto con las de otras partes del Estado, serán presentadas en los próximos días ante la Comisión de Peticiones del Congreso, con la intención de que se de un debate parlamentario, que desemboque en la adopción de medidas tendentes a establecer un control público de las Cuentas de la Casa Real, así como, que las donaciones y regalos que recibe el Rey, en su condición de Jefe de Estado, sean transparentes y pasen al patrimonio del Estado

En la actualidad ni los diputados, ni el Tribunal de Cuentas, ni la Fiscalía, ni los Tribunales, ni tan siquiera la comisión de secretos oficiales, tienen acceso a esta información, a pesar de que se considera que, Juan Carlos I posé un patrimonio que asciende a unos1.700 millones de euros.

El Partido Comunista de Salamanca valora como muy importante la acogida que ha tenido la campaña entre los salmantinos, y considera que la favorable respuesta es un indicador de que el sentimiento republicano va aumentado día a día también en Salamanca, como consecuencia de que cada día es más incomprensible que en un sistema que se dice democrático, la más alta institución del mismo, la Jefatura del Estado, no sea elegida democráticamente por los ciudadanos y sus gastos no tengan un control público.

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