El Partido Comunista de Salamanca (PCE) condena enérgicamente las agresiones efectuadas por ultraderechistas a jóvenes en nuestra ciudad durante este puente. Las noches del viernes 5 y del domingo 7 fueron escenario de sendas agresiones, la segunda de las cuales se ha saldado con siete puntos en la cara de un joven.
Desde el Partido Comunista de Salamanca (PCE) exigimos a las autoridades locales que muestren su condena oficial y pública a estas agresiones, y que inicien de una vez campañas de sensibilización social hacia este problema en crecimiento. Al contrario que otras ciudades, donde los responsables políticos se han posicionado en contra de la organización de actividades fascistas en el marco de sus localidades, Salamanca está siendo objeto de reunión de militantes ultraderechistas desde hace dos años sin que ninguna autoridad local manifieste su oposición, aunque sea meramente formal.
Por otro lado, el PCE-Salamanca también exige a las fuerzas de seguridad un control efectivo de de las actividades ultraderechistas efectuadas en Salamanca y Castilla y León. Desde hace un tiempo la organización ultraderechista y xenófoba Democracia Nacional está desarrollando propaganda de ideas violentas y racistas en nuestra ciudad sin que se les haya puesto impedimento alguno por parte de las autoridades institucionales ni policiales.
Asimismo, el PCE recuerda a la sociedad, y en especial a los medios de comunicación, que este tipo de agresiones no son producto de “peleas entre bandas” como habitualmente suele tratarse. Ambas agresiones se efectuaron sin provocación previa, y en concreto la de la noche del 7 fue producida por tres neonazis que se encontraban paseando en grupo y encapuchados por una zona frecuentada por jóvenes progresistas. Se trata por tanto de un ataque premeditado de la ultraderecha, y no de un choque espontáneo entre pandillas.
Por último, desde el PCE-Salamanca queremos mostrar toda nuestra solidaridad con los agredidos, y hacemos un llamamiento a la sociedad salmantina a repudiar estas agresiones y la ideología fascista que las impulsa. Sabemos que la sociedad salmantina en su conjunto desprecia este tipo de actitudes violentas e intolerantes, como sabemos por lo tanto que la ultraderecha tiene poco que hacer entre los salmantinos por más que intenten intimidarnos.
Desde el Partido Comunista de Salamanca (PCE) exigimos a las autoridades locales que muestren su condena oficial y pública a estas agresiones, y que inicien de una vez campañas de sensibilización social hacia este problema en crecimiento. Al contrario que otras ciudades, donde los responsables políticos se han posicionado en contra de la organización de actividades fascistas en el marco de sus localidades, Salamanca está siendo objeto de reunión de militantes ultraderechistas desde hace dos años sin que ninguna autoridad local manifieste su oposición, aunque sea meramente formal.
Por otro lado, el PCE-Salamanca también exige a las fuerzas de seguridad un control efectivo de de las actividades ultraderechistas efectuadas en Salamanca y Castilla y León. Desde hace un tiempo la organización ultraderechista y xenófoba Democracia Nacional está desarrollando propaganda de ideas violentas y racistas en nuestra ciudad sin que se les haya puesto impedimento alguno por parte de las autoridades institucionales ni policiales.
Asimismo, el PCE recuerda a la sociedad, y en especial a los medios de comunicación, que este tipo de agresiones no son producto de “peleas entre bandas” como habitualmente suele tratarse. Ambas agresiones se efectuaron sin provocación previa, y en concreto la de la noche del 7 fue producida por tres neonazis que se encontraban paseando en grupo y encapuchados por una zona frecuentada por jóvenes progresistas. Se trata por tanto de un ataque premeditado de la ultraderecha, y no de un choque espontáneo entre pandillas.
Por último, desde el PCE-Salamanca queremos mostrar toda nuestra solidaridad con los agredidos, y hacemos un llamamiento a la sociedad salmantina a repudiar estas agresiones y la ideología fascista que las impulsa. Sabemos que la sociedad salmantina en su conjunto desprecia este tipo de actitudes violentas e intolerantes, como sabemos por lo tanto que la ultraderecha tiene poco que hacer entre los salmantinos por más que intenten intimidarnos.
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