Una vez más es el sector servicios el que se lleva el grueso de parados, contando con 23.319 desempleados, cuatro veces más que la construcción que engloba un total de 5.174, personas más en situación de desempleo.
En cuanto al sector prácticamente inexiste en nuestra provincia,de industria, son 2.823 los nuevos parados.
Y por último en la Agricultura se registraron 1.175 desempleados.
En cuanto a la contratación,seguimos siendo testigos de como aumenta de forma alarmante la temporalidad laboral;de los 87 contratos efectuados tan solo 63 han sido de carácter indefinido.
Dato que refleja claramente el escenario en el actual mercado laboral; precario, inestable y por supuesto marcado por la temporalidad.
Continua la sangría de afiliados a la Seguridad Social; con un descenso de 1268 salmantinos respecto al mes anterior,la variación interanual refleja la destrucción de afiliación en 1.460 personas.
Respecto al tejido productivo observamos con preocupación como los actuales datos nos indican el mayor descenso de autónomos en un año; 109 menos que el mes pasado, 27.341 autónomos en total.
Por otro lado,son 12.600 familias las que cuentan con todos sus miembros en paro en nuestra provincia.
8.579 salmantinos percibieron en Dicienbre una pensión contributiva, 7.396 un subsidio y 1.767 una renta activa de inserción.
El paro sigue aumentando sin que ninguna política le ponga freno entre los menores de 25, y la brecha de contratación entre hombres y mujeres sigue aumentando.
Hay excusas de todo tipo y para todos los gustos, parece que al Partido Popular en este campo le sobra la imaginación, el Ministerio de Empleo destaca que “en términos intermensuales, este dato es el menos negativo desde 2007, ya que nunca se han producido crecimientos de afiliación en enero desde que existen datos comparables.”, parece ser que obvia el escandaloso dato que nos sitúa en niveles de hace doce años, después de que la Seguridad Social haya perdido 184.031 afiliados en Enero con respecto a diciembre.
Somos testigos de como aumenta dramáticamente la cifra de jóvenes y no tan jóvenes que abandonan nuestra provincia en busca de una oportunidad que se les niega en su tierra, y aún así tenemos que soportar las continuas mentiras de un gobierno que cada día más nos hace recordar aquello de “todo para el pueblo pero sin el pueblo”, nos mienten y se enorgullecen de ello.
A este ritmo nuestra provincia podría llegar a ser una de las más despobladas y con menos perspectivas de futuro del país, nuestra economía y capacidad productiva no pueden estar supeditadas únicamente al sector servicios y la construcción, debemos impulsar las políticas sociales y generar un mercado laboral estable, y es la ciudadanía en su conjunto la que debe demandar estos cambios.
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